7 Ventajas de llevar a tu hijo a una Escuela Infantil desde Bebé

Los tres primeros años de vida del niño son fundamentales para sentar las bases de su desarrollo. Ir a una escuela infantil tiene múltiples ventajas. En este período se inician la mayoría de los aprendizajes y se promueve la adquisición de otros más complejos. El niño necesita apoyo externo para avanzar en cada uno de los ámbitos de su desarrollo, y esta ayuda se la brindan los padresy la Escuela Infantil.

La familia es la base y el soporte en el cual se desarrolla la vida durante esta etapa, por ello  la seguridad y el afecto que recibe el niño de sus padres es fundamental e insustituible.

La Escuela Infantil es el complemento ideal ya que proporciona un contexto que estimula sus capacidades de la mano de profesionales, en un entorno acorde a sus necesidades y en la compañía de un grupo de iguales, con los que a través del “juego” adquirirá múltiples aprendizajes.

7 Ventajas de llevar a tu hijo a una Escuela Infantil desde Bebé

1. La socialización del niño:

Aprende a compartir, a esperar su turno, a respetar normas y a convivir con sus iguales y a conocer las consecuencias de su modo de actuación. Le enseña a salir de ese “egocentrismo” propio de la edad y establezca vínculos con iguales y adultos.

2. Desarrollo de la motricidad gruesa:

Gracias a los materiales que potencian la psicomotricidad, adquirirá un mayor control sobre sus movimientos, afianzará la coordinación de los mismos y participará en juegos y actividades al aire libre.

3. Desarrollo de la motricidad fina:

La realización de tareas manipulativas utilizando material específico para cada edad permitirá la adquisición de la “pinza digital” y el desempeño de tareas cada vez más complejas que potencian la coordinación oculo-motriz.

4. Desarrollo del lenguaje:

Tanto a nivel comprensivo como expresivo, realizando juegos en los que se trabajan los sonidos, se escuchan canciones, se cuentan historias al objeto de incrementar el vocabulario, construir frases más complejas, se hacen preguntas y se trabaja la articulación.

5. Desarrollo cognitivo:

Mediante actividades concretas se fomenta la atención, la memoria, el razonamiento y la creatividad.

6. Adquisición de hábitos y rutinas:

En la escuela se hacen las mismas cosas a las mismas horas, como por ejemplo comer, dormir la siesta, juegos en grupo, tareas individuales, etc.

7. Habilidades de autonomía:

Aprende a beber y comer solo, adquiere el control de esfínteres y lo aprende con sus compañeros, se inicia en ponerse y quitarse la ropa, etc.

Conclusión: La Escuela Infantil proporciona estímulos y experiencias necesarias para esta etapa de la vida del niño, siendo fundamental la comunicación y la colaboración con la familia, para que exista una continuidad y coherencia entre ambos y de este modo el niño se sienta apoyado en todos sus logros y rodeado del afecto imprescindible para su equilibrio emocional.

Por otro lado, la Escuela Infantil de 0 a 3 años proporciona una valiosa experiencia y preparación para la incorporación al Colegio, facilitando su adaptación al haber estado en un marco social y educativo similar.

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